Consuelo de Tontos

Enjuagadas las lágrimas de la derrota del viernes, por lo general la psiquis trata de autoprotegerse de la angustia buscando justificaciones y ventajas del, paradójicamente, mal resultado.
Creo que la mayoría estamos de acuerdo que Argentina hizo un buen papel futbolístico en todo el torneo y se quedó afuera en un partido de instancia eliminatoria difícil y parejo contra la selección local, que venía arrasando con todo y se planteaba como favorito. Terminaron pidiendo pista. No me interesan los detalles de si se hizo bien o mal tal cosa o tal cambio, pero sí que se vio en la selección de lo mejorcito de la era post-Maradona, con destellos de muy buen juego de equipo y magia individual. Como resultado de ello disfrutamos lindas jugadas y goles. Por mi parte, la tristeza se divide por una parte, por mi empatía hacia los jugadores que, realmente se esforzaron, tenían mucha ilusión y posibilidades de ganar un torneo que, es cierto, es lo más importante a lo que aspira un jugador de fútbol en su vida; por otra parte porque tenía ganas de ver más gambetas de Tévez, Messi, Riquelme y cía. Pongamos un manto de piedad sobre la gresca del final de los penales, porque independientemente de quién haya provocado a quién, es una lástima que se haya terminado así.

Las excusas y consuelos que se me ocurren son las siguientes, espero más ideas para aplacar la angustia:

• Fuimos indiscutiblemente el mejor equipo del Mundial y nos quedamos afuera porque nos bombeó el árbitro, la FIFA y Pelé; y no tuvimos suerte con los penales, que son una lotería y es un sistema que hay que cambiar. Por lo tanto somos los campeones morales, como en el ’90.
• Ahora que se jodan porque lo que queda del torneo va a ser una cagada, dado que sacaron al mejor equipo del mundial.
• Nos perjudicó la lesión de Abbondanzieri en un claro foul de un guacho delantero alemán, que lo hizo a propósito porque ellos querían ir a penales.
• Los alemanes estaban que pedían pista cuando se encontraron con un gol pedorro de esos que ellos saben hacer, que no sé como vale lo mismo que el golazo que hizo Ayala.
• A partir de ahora no sufriremos más. Obvio, un muerto no sufre.
• En breve no escucharemos más análisis absurdos sobre lo que fue y no pudo ser.
• No discutiremos más sobre la conveniencia o no de ver los partidos en horas de clase.
• No habrá excusa para decir que el Mundial tapa esto o lo otro.
• Los programas de TV se ahorrarán costosísimas estadías en Alemania para las pésimas coberturas y producciones que realizaron. Ahora volverán a hacer pésimas producciones y coberturas en Argentina. Tal vez, en la depresión y con la plata que se ahorran se les ocurra contratar a alguien que tenga una buena idea.
• En breve no veremos más las ochocientas publicidades de Messi en la tele.
• Macri podrá volver de Alemania a ocuparse de sus dos cargos part-time como presidente de Boca y diputado nacional. El histórico club y el Honorable Congreso se lo agradecerán.
• Podremos disfrutar del mejor árbitro del mundo hasta la final: Elizondo.
• Nos ahorraremos los destrozos de los festejos en todo el país.
• Todos los hipócritas mundialeros guardarán sus banderitas y camisetas.
• No seremos favoritos para el próximo mundial, por lo tanto seremos favoritos nuevamente.
• Ahora podrán concentrarse en la Copa América, la Libertadores y las eliminatorias del 2010, cosa que Alemania y Francia no podrán hacer, preocupados por tratar de ganar este mundial que ya no le interesa a nadie.
• Brasil e Inglaterra por suerte también quedaron afuera, ni merecen haber llegado tan lejos.
• No tendremos que sufrir más noticias ridículas como esta: