Un tiro para el lado de la justicia

Pocas veces el esfuerzo laboral que uno hace (que siempre se hace) se traduce en un buen resultado y es percibido por los rangos gerenciales de una empresa. Menos aún que lo reconozcan públicamente y más difícil todavía que hagan hincapié en una persona en particular. Esta vez se alinearon todos esos planetas y lo exhibo con orgullo.

Del coordinador de proyecto (El Sr. J):

MaxD, a mi entender te mereces un reconocimiento adicional por la seriedad y dedicación con la que encaraste este “trabajito” a pesar de la etapa tardía en la que te involucré. No me caben dudas que sin tu aporte nos las hubiéramos visto bastante más complicados.

Del gerente de ingeniería:

Mis felicitaciones a J quién condujo al grupo a éste resultado final, como asimismo y especialmente a MaxD quién le puso un excelente profesionalismo y dedicación a que los trabajos se cumplieran y se lograra corregir el desfasaje de tiempos con que veníamos.

Pero la real satisfacción (el por qué uno hace todo esto) es la de poder disfrutar lo que uno hace, el placer de compartir con un buen grupo de trabajo (más precisamente buenas personas) una aventura como ésta. Y en definitiva de poder llevar a cabo las cosas que uno encara (no importa lo que haga) con el compromiso de hacerlo con ganas e intentar que eso devenga en un aprendizaje (más). Suena posmo, es cierto, pero no pierdo de vista el contexto de explotación en el que vivimos, en fin.