Mis 5 formas favoritas de dejar un empleo
Tengo como costumbre cambiar de empleo cada tres años, más o menos. Esto viene siendo así desde que empecé a trabajar hace ya un buen tiempo. Como para no hacer siempre lo mismo, esta vez renuncié antes de cumplir los 2 añitos, con el agregado menor de que decidí radicarme en otra ciudad. Esta es una de las razones por las cuales estuve ausente todo este tiempo. Reedito (refrito) un viejo textito que me sirvió para conmemorar el cambio de empleo anterior y lo completo con esta nueva experiencia.
Cuando uno renuncia a un empleo por decisión propia, y con la expectativa de hacer algo mejor, se produce una suerte de agradable sensación, algo así como "ser dueño de tu vida". Ese acto en el cual me vuelvo a apropiar de mi "fuerza de trabajo" para hacer con ella lo que quiera. Y es mía porque yo quiero. Ese pequeño placer que se da pocas veces en la vida puede expresarse en diversas fantasías que uno puede elaborar para el momento en que va y dice "me voy, desde ahora me pertenezco a mí". Ante la lógica pregunta del jefe: "¿Por qué?" hay varias respuestas posibles. Estas son mis favoritas:
Alternativa 1:
"Mirá, resulta que ayer me comunicaron que soy el único heredero directo de los Habsburgo. A partir de entonces Austria, Hungría, Suiza, Checoslovaquia, el sur de Alemania, el norte de Italia, el sur de Francia y no me acuerdo cuantos paisitos más son míos. Con chaucha y palito compré esta compañía y todos Uds. también son míos. Necesito que mañana salgas a hacer unas visitas a obra por Tartagal, Oran, Humahuaca, Paso de Jama, Calama, Antofagasta, Gral. Roca, Rincón de los Sauces, Rosario, San Nicolás, San Pedro, ........ Obviamente sin desatender todo el resto de los temas pendientes."
Alternativa 2:
Dejarme crecer la barba y el pelo, ir con una boina y una remera del "Che", y mientras le soplo el humo de mi habano en la cara, le digo:
"Después de leer la obra completa de Karlitos Marx en alemán de adelante pa'trás y de atrás pa'delante entendí finalmente que tus relaciones capitalistas de producción obstaculizan el desarrollo de mis fuerzas productivas, así que me voy a reagrupar con mis camaradas en la selva boliguaya hasta que todos mis ex-compañeros entiendan que pertenecen a una clase explotada en permanente situación antagónica con aquella que ha usurpado los medios de producción, y se me unan y podamos iniciar la Revolución."
(Esta alternativa quedó descartada porque la barba me crecía mucho más que el pelo y causaba más risa que miedo, además las revoluciones ya están d’mode)
Alternativa 3:
"Luego del best-seller '¿Quién se ha llevado mi queso?' decidí plasmar en un libro lo que creo será el nuevo éxito dentro de la línea de 'Autoayuda para Gerentes y otros seres posmodernos urbanos', el mismo se titulará '¿Quién se ha llevado a mi empleado?', ya tengo algunos capítulos en borrador: 'Cap. 4 - Si le vienen con problemas, Ud. siempre tiene más que ellos.', 'Cap. 5 - Compórtese como si le importara', ‘Cap. 10 – Ud. Sabe que siempre encontrará otro empleado’, ‘Cap. 13 – Échelo antes de encariñarse con él’, ‘Cap. 16 - Si el tipo no se babea al hablar, no es un imbécil. Cuidado!', 'Cap. 25 - Que parezca un accidente'. Y se me ocurren más cosas todo el tiempo, creo que me voy a llenar de plata".
Alternativa 4:
"Me voy a Bariloche con mi chica a fabricar dulce de Rosa Mosqueta"
Esta última alternativa no la pude aplicar porque lo de la Rosa Mosqueta ya está cubierto, ya hay mucha gente que se dedica a eso. En todo caso si a alguno se le ocurre hacer un sistema de control para una planta de procesamiento de dulce de Rosa Mosqueta y/o un Mosquetoducto, podría participar en ello, pero por más que insistí en la importancia de crear tal infraestructura, no supieron escucharme, es entonces que apliqué la…
Alternativa 5:
Un día agarré, lo fui a buscar a mi jefe, y le dije: “Hagamos un trato: Yo renuncio, me voy a Bariloche con mi chica, y hago lo mismo que hacía acá pero desde allá con una PC y una conexión a interné … y uds me pagan”. Aunque Ud. no lo crea, me aceptaron la propuesta. Bueno, no fue tan así, hubo un par de meses de negociaciones, pero afortunadamente, se dio.
Las dos últimas semanas de Septiembre estuve dedicado terminar a mi último proyecto trabajando en relación de dependencia, así que estuve en Tartagal (Pcia. de Salta) en lo que ha sido una suerte de “viaje de egresados”, dado que, si bien se trabajó duro, estuve con un par de compañeros/amigos que hicieron del viaje hasta algo como agradable. Y, como siempre en estos viajes, cosechando un puñado de anécdotas que a la larga terminan siendo entretenidas (en el momento tal vez no).
Ahora, ya hace más de una semana que estoy instalado. Como el proveedor de banda ancha decidió no dar más conexiones hasta nuevo aviso, peligró mi estrategia, pero por suerte un amigo de mi chica me presta su casa para ir a trabajar allí y tener disponible la conexión. Por ahora parece ir bien el tema, organizándome, chateando mucho con mis compañeros, con los horarios un poco descajetados, pero con un marco espectacular y un par de compañeros muy divertidos.
La decisión de venirme me costó, dejé varias cosas en Buenos Aires (familiares, amigos, actividades varias que pueden hacerse allí) pero espero ganar más. Ya gané estar junto a la persona que amo y levantarme todos los días y mirar por la ventana uno de los paisajes más lindos que conozco, respirar aire puro, etc. La idea es regresar a Buenos Aires unos días por mes como para realizar visitas varias y reunirme con la gente del trabajo. El otro día tuve una conferencia telefónica de dos horas y media que resultó un éxito, así que con eso, con el chat y con el mail las cosas parecen poder manejarse bastante bien.
Como estreno, el fin de semana pasado estuvimos en Pto. Madryn viendo a las ballenas y la verdad que es un espectáculo maravilloso y recomendable.
Y para irme acostumbrando, el día de hoy estuvo así:
Saludetes para todos!!
Cuando uno renuncia a un empleo por decisión propia, y con la expectativa de hacer algo mejor, se produce una suerte de agradable sensación, algo así como "ser dueño de tu vida". Ese acto en el cual me vuelvo a apropiar de mi "fuerza de trabajo" para hacer con ella lo que quiera. Y es mía porque yo quiero. Ese pequeño placer que se da pocas veces en la vida puede expresarse en diversas fantasías que uno puede elaborar para el momento en que va y dice "me voy, desde ahora me pertenezco a mí". Ante la lógica pregunta del jefe: "¿Por qué?" hay varias respuestas posibles. Estas son mis favoritas:
Alternativa 1:
"Mirá, resulta que ayer me comunicaron que soy el único heredero directo de los Habsburgo. A partir de entonces Austria, Hungría, Suiza, Checoslovaquia, el sur de Alemania, el norte de Italia, el sur de Francia y no me acuerdo cuantos paisitos más son míos. Con chaucha y palito compré esta compañía y todos Uds. también son míos. Necesito que mañana salgas a hacer unas visitas a obra por Tartagal, Oran, Humahuaca, Paso de Jama, Calama, Antofagasta, Gral. Roca, Rincón de los Sauces, Rosario, San Nicolás, San Pedro, ........ Obviamente sin desatender todo el resto de los temas pendientes."
Alternativa 2:
Dejarme crecer la barba y el pelo, ir con una boina y una remera del "Che", y mientras le soplo el humo de mi habano en la cara, le digo:
"Después de leer la obra completa de Karlitos Marx en alemán de adelante pa'trás y de atrás pa'delante entendí finalmente que tus relaciones capitalistas de producción obstaculizan el desarrollo de mis fuerzas productivas, así que me voy a reagrupar con mis camaradas en la selva boliguaya hasta que todos mis ex-compañeros entiendan que pertenecen a una clase explotada en permanente situación antagónica con aquella que ha usurpado los medios de producción, y se me unan y podamos iniciar la Revolución."
(Esta alternativa quedó descartada porque la barba me crecía mucho más que el pelo y causaba más risa que miedo, además las revoluciones ya están d’mode)
Alternativa 3:
"Luego del best-seller '¿Quién se ha llevado mi queso?' decidí plasmar en un libro lo que creo será el nuevo éxito dentro de la línea de 'Autoayuda para Gerentes y otros seres posmodernos urbanos', el mismo se titulará '¿Quién se ha llevado a mi empleado?', ya tengo algunos capítulos en borrador: 'Cap. 4 - Si le vienen con problemas, Ud. siempre tiene más que ellos.', 'Cap. 5 - Compórtese como si le importara', ‘Cap. 10 – Ud. Sabe que siempre encontrará otro empleado’, ‘Cap. 13 – Échelo antes de encariñarse con él’, ‘Cap. 16 - Si el tipo no se babea al hablar, no es un imbécil. Cuidado!', 'Cap. 25 - Que parezca un accidente'. Y se me ocurren más cosas todo el tiempo, creo que me voy a llenar de plata".
Alternativa 4:
"Me voy a Bariloche con mi chica a fabricar dulce de Rosa Mosqueta"
Esta última alternativa no la pude aplicar porque lo de la Rosa Mosqueta ya está cubierto, ya hay mucha gente que se dedica a eso. En todo caso si a alguno se le ocurre hacer un sistema de control para una planta de procesamiento de dulce de Rosa Mosqueta y/o un Mosquetoducto, podría participar en ello, pero por más que insistí en la importancia de crear tal infraestructura, no supieron escucharme, es entonces que apliqué la…
Alternativa 5:
Un día agarré, lo fui a buscar a mi jefe, y le dije: “Hagamos un trato: Yo renuncio, me voy a Bariloche con mi chica, y hago lo mismo que hacía acá pero desde allá con una PC y una conexión a interné … y uds me pagan”. Aunque Ud. no lo crea, me aceptaron la propuesta. Bueno, no fue tan así, hubo un par de meses de negociaciones, pero afortunadamente, se dio.
Las dos últimas semanas de Septiembre estuve dedicado terminar a mi último proyecto trabajando en relación de dependencia, así que estuve en Tartagal (Pcia. de Salta) en lo que ha sido una suerte de “viaje de egresados”, dado que, si bien se trabajó duro, estuve con un par de compañeros/amigos que hicieron del viaje hasta algo como agradable. Y, como siempre en estos viajes, cosechando un puñado de anécdotas que a la larga terminan siendo entretenidas (en el momento tal vez no).
Ahora, ya hace más de una semana que estoy instalado. Como el proveedor de banda ancha decidió no dar más conexiones hasta nuevo aviso, peligró mi estrategia, pero por suerte un amigo de mi chica me presta su casa para ir a trabajar allí y tener disponible la conexión. Por ahora parece ir bien el tema, organizándome, chateando mucho con mis compañeros, con los horarios un poco descajetados, pero con un marco espectacular y un par de compañeros muy divertidos.
La decisión de venirme me costó, dejé varias cosas en Buenos Aires (familiares, amigos, actividades varias que pueden hacerse allí) pero espero ganar más. Ya gané estar junto a la persona que amo y levantarme todos los días y mirar por la ventana uno de los paisajes más lindos que conozco, respirar aire puro, etc. La idea es regresar a Buenos Aires unos días por mes como para realizar visitas varias y reunirme con la gente del trabajo. El otro día tuve una conferencia telefónica de dos horas y media que resultó un éxito, así que con eso, con el chat y con el mail las cosas parecen poder manejarse bastante bien.
Como estreno, el fin de semana pasado estuvimos en Pto. Madryn viendo a las ballenas y la verdad que es un espectáculo maravilloso y recomendable.
Y para irme acostumbrando, el día de hoy estuvo así:
Saludetes para todos!!
1 Comentarios:
Permiteme decirte que tu relato es bellamente afortunado.
Publicar un comentario
<< Home