Estrategia del gallina

Lo conocí mencionado como un modelo de la teoría de juegos aplicado a la Ciencia Política. El juego del gallina tiene su ícono en la tradición cinematográfica de los niños yanquis ricos aburridos de la década del 50 que jugaban a enfrentarse con autos a toda velocidad y perdía el que se salía primero del camino. En política corresponde a aquella estrategia donde las partes en conflicto negocian agresivamente (y progresivamente, subiendo la apuesta) esperando que el otro ceda por miedo a perder más de lo que ya perdió. Si nadie cede, se hacen bolsa.

En el deporte del balon-pié: dícese de aquel que ganando un partido de local por dos goles de diferencia, con dos jugadores más, y a 25 minutos de terminar logra que le empaten y lo eliminen de cierta copa-fetiche-ahora-con-nombre-de-banco-extranjero.

(Nunca le di mucha bola al fútbol, pero ayer era lo único que podía hacer con Jx berreando en mi oído... y cuando pasé por cierto canal, pude ver dificultosamente entre las placas publicitarias que al equipo del que soy tenue simpatizante le anularon un gol injustamente, así que me quedé para ver cómo metían uno que sí le cobraban y ahí me enganché. Iluso de mí)