lunes, marzo 19, 2007

"Quedó olor a goma quemada"

... dijo mi suegra durante el almuerzo de ayer. Y no, malpensados, no se refería a la obscenidad que imaginan (la misma que se me ocurrió a mí mientras levantaba mi mandíbula del plato), sino a una segunda parte de la frase "frenarle el carro a alguien" que merece que le hagan notar que se "pasó de la raya". El frenaje de carro es una actividad que creo tendré que poner en práctica más seguido, hay un par que se están comprando todas las rifas para ganarse un olor a goma quemada.