martes, junio 29, 2010

Pobre Martín...

No se da cuenta todavía que para ser imparcial y republicano no se puede fallar contra la policía ni contra la curia. Una pena, una carrera tan prominente echada a perder por resistirse a la corporación judicial en esta errónea obsesión de querer tener simpatía por pobres, feos y sucios. ¡Vamos Bariloche, ya picamos en punta!