Efecto Cenizas I

Al parecer, ciertos conductores se espantan al ver alguien con barbijo y lentes caminando por una calle de barrio. Más impresión parece causarles si se trata de un niño de tres años, entonces aceleran para dejar detrás de una nube de polvo la triste imagen barilochense de hoy. Como en una paradoja de profecía autocumplida, me atrevería a decir que si no se asustaran tanto, el barbijo no sería necesario.

Pesadilla

Hoy es un gran día en términos políticos y por primera vez en mi vida votaré convencido (y todo indica que será a ganador), en todos estos años he aprendido que los votos testimoniales, a los que somos tan afectos los clasemedieros, han servido para poco, para nada o para demasiado en contra de lo que realmente pensamos y queremos los progres. En 2007 hice una de las peores elecciones de mi vida, en términos políticos, este es el año para reivindicarme. No obsta de ello que pueda equivocarme de nuevo, pero aquella vez ni siquiera estaba convencido. Hoy, arrinconado por propios y ajenos, me he vuelto más cristinista que nunca.

Anoche tuve un mal sueño, iba convencido al cuarto oscuro a poner la papeleta correcta y veo mi nombre como vice en la boleta de Binner. Traicionero el subconsciente.

Ahora que ya me desperté (creo), espero todo siga su curso normal y sonreir al final del día... y dentro de cuatro años poder decir que estaba en lo cierto.