jueves, febrero 25, 2010

Regla de tres simple

Estoy en la cuenta regresiva para la carrerita del fin de semana y me debato si llevar o no bastones. Los que saben dicen que son una gran diferencia, yo los probé entrenando y realmente no bajé mucho los tiempos, seguramente ayudan a preservar las piernas, pero se pierde tiempo al armarlos y desarmarlos en cada pendiente (son medio incómodos para tenerlos armados mientras corrés, aparte de peligrosos).

Además hay que cargar el peso extra (unos 600 grs). Entonces me preguntaba si cargar los bastones los 80 km sería lo mismo que cargar 48 kgs. por 1 km. Pienso en todo esto mientras termino de desamorcillarme el dedo del pie, me recupero de una contractura servical, me trato una alergia en la mano y comparto mis disquisiciones con el gasista que nos está instalando un calefactor en el living.

Último momento (26/02 11:50): A todas esta pavadas debo sumarle 38 grados de fiebre de Jx, con quien pasamos una noche inolvidable de llantos y nada, pero nada de sueño... Todo está perfecto, inmejorable, las condiciones están dadas.... para que me vaya como el culo. Y bué... ya está.

viernes, febrero 19, 2010

Revista Axolotl: Número 30

Salió el número 30 de Revista Axolotl.

Axolotl se renueva, actualiza su sala de máquinas. Acompañando los rediseños de los últimos años finalmente queremos un mayor contacto con nuestros lectores, compartir con ellos opiniones, acercarlos. En una época donde todo se interconecta, el axolotl asoma tímidamente sus ojitos al ras del agua. No quiere resignar el remanso de paz de la pecera, pero quiere ver el mundo, conocer otros horizontes.

Un poco obligado a renovar la creatividad, la columna de este año estará dedicada a lo que decidí llamar Antagonismos, esas otras historias que también pueden ser contadas. Y como para establecer un enlace se me ocurrió arrancar con la contracara del último texto de la columna anterior (Civilización y Barbarie) que, como no podía ser de otra manera se llama "Antagonismos". Allí encontrarán la presentación de la propuesta literaria y la segunda parte de "Civilización y Barbarie".

El cuñado Cattel decidió seguir con los lugares comunes y se fue a "Un gimnasio" donde recordó el clásico gimnasio artesanal de barrio en contraste con cierta macdonalización del asunto, como ocurre con casi todo. Aparte de ello, lo felicitamos desde aquí por la reciente publicación en Perfil de un excelente microrrelato: Jetlag.

martes, febrero 16, 2010

Torpezas cotidianas: Pateando bañeras

Anduve muy bien el domingo, entrenando para mi nuevo intento de grossitud deportiva di una linda vuelta de unos 40 km por las montañas. Claro que trastabillé, me resbalé y hasta metí la pata en el barro, pero no pasó nada, todo quedó bajo control y el paseo deportivo se disfrutó con creces, contento sobre todo porque me manejo cada vez mejor (o menos peor) entre pedreros y acantilados (ponderando mi natural torpeza de porteño).

Ya canchero ayer lo estaba bañando al pequeño Jx y se me ocurre patear con ganas el borde de la bañera con el pie desnudo y ganarme una morcilla en el segundo dedo más pequeñito. Y ahora resulta que estoy con un paquete de choclo congelado sobre el empeine, mucho, pero mucho Diclofenac y una plegaria para rogar que no me haya ni fisurado el asunto.

sábado, febrero 13, 2010

Fuerza

Ayer terminó el interesante ciclo "Presidentes de Latinoamérica" (transmitido por Canal 7 en los recovecos que deja el fútbol) con el programa dedicado a Cristina, tal vez no fue el mejor logrado, pero aún así sirvió para conocerla un poco más.

Siempre fui responsable. Odio las victimizaciones. Tengo la obligación de tener fuerzas. Tengo la obligación de sacarlas de algún lado. Del estómago, de las tripas, de la cabeza, de donde pueda.


Cuando Filmus le preguntó sobre la principal deuda de nuestro país ella admitió:

Todavía es un país injusto, pero no sólo en términos de distribución del ingreso


Mirá vos, yo pensaba que era el avasallamiento de las instituciones republicanas...

Un nuevo intento de grossitud

Anduve dudando mucho porque no me cerraban los números, pero como parece que el asunto laboral finalmente remonta, me decidí y voy por el segundo intento.



Un 6to puesto es difícil de superar, pero quién sabe...

miércoles, febrero 10, 2010

Efecto Coriolis XI: En Europa no se consigue

Hay un revuelo en Bariloche por la presentación (aparentemente a nivel mundial) de una camioneta de una reconocida marca alemana, que incluyó un evento (cerrado al público) con la presencia del más famoso grupo de rock alemán y pruebas de manejo que aún se están realizando en la zona. Esto a priori fue visto con buenos ojos por la promoción que implica como centro turístico. Hoy escucho en la radio comentarios de varios vecinos que tuvieron la mala suerte de cruzarse con estos artefactos en rutas y caminos muy transitados por locales y turistas. Todos mencionaron más o menos la misma situación: circulación a llamativas altas velocidades por caminos de ripio, gran desprendimiento de piedras, algunos parabrisas rotos y, los que se animaron a seguir al conductor para pedirle los papeles, se encontraron que se trataban en todos los casos de alemanes que no hablaban casi nada de castellano, y por supuesto, sin seguro. Uno de estos vecinos se acercó hasta donde se encuentra el centro de operaciones de este evento, allí contactó a la persona aparentemente responsable y que sí hablaba castellano, que se le mofó en la cara "sí, estamos rompiendo muchos parabrisas. ¿Cuánto sale?" mientras sacaba la billetera.

Para quienes aún creen en las idiosincrasias y admiran los modos de vida del hemisferio norte, pueden seguir desencantándose. Algunos puede seguir pensando que lograron convencer a los correctísimos conductores alemanes que acá es buena costumbre arrojarse piedras en los caminos porque total este es un país de mierda. Otros pensarán que como este es un país de mierda no hay que hacer barullo para que puedan llegar las inversiones, aunque nos tengamos que prostituir barato.

martes, febrero 09, 2010

Ahora dicen que las costas no son libres

Se ve que uno vive naturalmente desinformado, y de vez en cuando se espabila.

Resulta que hoy escuchaba en la radio un lindo programa local (¡Gracias "Ley de Medios"!) llamado "Entre el silencio y el ruido" (FM 89.1 Bariloche). Alli se tratan temas especialmente relevantes para la comunidad local, con invitados de importancia que voluntariamente se dejan acribillar a preguntas de las periodistas y los oyentes. Al programa de hoy estaba invitado el intendente del Parque Nacional Nahuel Huapi, Juan Salguero, con quien hicieron una recorrida por los temas más urticantes que refieren a esta convivencia de grandes centros urbanos, una inmensa afluencia turística, la especulación inmobiliaria que esta conlleva y un corredor bioceánico con un Parque Nacional cuyo fin es preservar el medio ambiente y promover la recreación y conocimiento de la naturaleza.

Para la frutilla del postre dejaron un tema muy caliente: el del libre acceso a las costas. Todo el mundo sabe (o cree saber) que los ríos y lagos son de dominio público y que nos asiste (o asistía) el derecho a hacer usufructo público de ellos y de las costas hasta la línea de ribera en su cota máxima (o algo así). Con la proliferación del turismo, el crecimiento urbano y la instalación de los alambrados se han venido dando, cada vez más frecuentemente, conflictos entre propietarios costeros y transeúntes que pretenden aprovechar un día de recreación a la vera de un río o lago. Tal es así que en un día lindo nos amarrocamos todos en las pocas costas que quedan de acceso público o nos vamos bien lejos o pagamos un camping. Varias organizaciones sociales y organismos oficiales (entre los que se encuentra la Muni y el Parque) han tratado de contrarrestar esta tendencia a la privatización de las costas, sin demasiado éxito.

Es de entenderse, para un propietario costero que desee guardarse para sí el uso y abuso de la costa que se compró, también es de entenderse (y esto lo confirmó el intendente) que nadie quiere gente merodeando cerca de su propiedad y menos aún que dejen basura o acampen por ahí. Es así que venimos tambaleando entre el derecho del público a poder acceder y disfrutar de las costas de su ciudad y el derecho del propietario a evitarlo.

Quienes no tenemos dinero para comprarnos una costa de río o lago creíamos que nos asistía el derecho a acceder allí. Ahora bien, recién hoy me entero que estábamos equivocados. Resulta que a fines del año pasado, la Corte Suprema emitió un fallo al respecto que exime a los propietarios de un lote costero a dar servidumbre de paso y permitir el acceso a su costa. El argumento de que el río en cuestión en ese tramo no es navegable no es consuelo para los muchos que no navegamos e igual queremos poder tirar una reposera en una costa y tomar unos mates alguna de las pocas tardes de verano que tenemos en la Patagonia. El gris que se notaba en la legislación no era que la costa fuera de uso público e intangible para construcciones (cosa que está clara), sino de cómo garantizar ese uso para la población de a pie. Ahora queda claro que si el propietario argumenta que brindando ese acceso está lesionado su derecho al usufructo de su propiedad, puede alambrar hasta el medio del río y evitarse problemas.

Que las costas estén privatizadas no es novedad, la novedad son los alambrados y la explotación inmobiliaria que hace alarde justamente de la "exclusividad" en el acceso. El intendente también reveló otro dato impactante sobre la propiedad privada dentro del Parque Nacional, esto es que la gran mayoría de los 4000km de costa de río que hay dentro del parque nacional más grande del país son propiedad privada preexistente a la creación del parque. Alguna vez nos preguntamos cómo podía ser que hubiera propiedades dentro de un Parque Nacional, y es así, siempre fue así, lo que nos revela su existencia hoy son los alambres de púas y la seguridad privada.

Es así que en la llamada "Capital de los Lagos", vamos camino a que puedan verse solo en las postales.

Obscenidades

Que Néstor pueda comprarse un hotel es socialmente obsceno, esto ya es porno. Con carótidas más relajadas, amasan fortunas mientras festejan extremaunciones prematuras.

lunes, febrero 08, 2010

La dura vida del animal político

Parece que las carótidas son el talón de aquiles del animal político. Más allá de tendencias genéticas, sin duda la responsabilidad del animal político en la arena pública conlleva presiones muy difíciles de manejar y de descomprimir. Incluso en vacaciones o en el descanso semanal, el animal político sigue siendo un animal político. Aunque duerma, lo hace con un ojo abierto y el oído atento, agazapado pero listo para actuar y salir al ruedo ante el más mínimo movimiento.

Distinto del humano de a pie que, mal que mal, logra desconectarse cada tanto de su vida laboral, cortar con cierta rutina (ese es su karma), desentenderse de un mundo que no lo está mirando e interpelando todo el tiempo.

Distinto del bicho de banco que supo procurarse sesiones de yoga, clases de teatro y abonos a CNN para sobrellevar la independencia y autonomía que le brinda la caja de cristal que lo mantiene a resguardo del animal político.

Eso sí, el animal político, si sobrevive, puede contemplar satisfecho sus particulares cicatrices: las que le quedaron en cuerpo y alma, y las que dejó en los libros. Los otros a lo sumo recogerán un anecdotario para entretener a los nietos en las noches de Navidad.

Son pocos los que se animan a aventurarse en la arena pública, pero lo hacen aún frente al oprobio del hombre de a pie y a la asepsia del bicho de banco. Y esa actitud es digna de admirar.

viernes, febrero 05, 2010

Un sueño hecho realidad


... al primer mundo al mejor estilo del agrarian way of life.

martes, febrero 02, 2010

Los dos millones

Es feo lo de los dos millones, es feo enterarse, aunque en realidad no es novedad que a los Kirner les gusta la tarasca, y la amasan al mejor estilo argentino: especulando. Todos aclaran que no es ilegal, sin duda, pero es indefendible la ética del acto. Todos lo sabemos, en especial los millonarios estrella de la oposición que supieron seducir a su electorado con su imagen de "empresario exitoso", por eso ellos no levantan mucha polvareda con este asunto.

A los lectores de La Nación les da bronca, les parece antiético que los Kirner hayan hecho uso de información clasificada para hacerse de una diferencia de cambio que a ellos les hubiera gustado también aprovechar, por supuesto en detrimento de quienes más sufren las devaluaciones (y diría que casi cualquier modificación en la macroeconomía que no fuera un aumento masivo de salarios y subsidios). Por el contrario, a mí me da bronca que un solo hogar tenga 6,6M$ para comprar dólares, eso me resulta obsceno, me parece una bofetada para quienes se esfuerzan para conseguir el pan de cada día y viven con la ¿ilusión? de que el trabajo dignifica. Y no me refiero a mí ni a ninguno de los pequeñoburgueses con sensibilidad social que sin duda también nos cuesta ganar lo que tenemos (poco o mucho), sino al que se embarra las patas para ir a laburar todos los días.

Lo que pongo en duda es una relación directa con la política, como si ese "desliz de honestidad" (para ser indulgente) fuera en detrimento de un proyecto político, como si lo impugnara. Me interesa cómo se mueve un animal político, como son los Kirner en este caso. Cómo se comportan escindiéndose de su individualidad. Fíjense ustedes que los Kirner sabían que Redrado tenía la información, que iba a difundirla si avanzaban (ese mensaje mafioso publicado en primeras planas, luego desmentido en pie de página) y, una vez confirmado el asunto del despido, prolijamente filtrada por todos lados. Un individuo movido puramente por su ambición económica hubiera tomado nota de la amenaza, hubiera negociado para no quedar expuesto y mantener oculto su patrimonio obtenido por movimientos para nada éticos. Pero por suerte el animal político pudo más, se sobrepuso al superyo individual y fue para adelante con la decisión ya tomada, convencido que era la correcta.

Actualización 15:45hs: Al hacer un repaso de otros blogs encuentro la repercusión de la explicación de NK difundida en el programa de Víctor Hugo. Este dato pone un matiz sobre la calificación de "especulador" (la compra/venta de propiedades podría incluirse allí pero no tan claramente como con la compra/venta de divisas), no obstante releo lo que escribí a la vista de este nuevo dato (muy importante por cierto) y sigue diciendo más o menos lo que opino sobre este asunto. Capítulo aparte puede merecer la difusión barata de carne podrida, pero eso ya está trillado y casi que aburre.