miércoles, marzo 23, 2011

Divagaciones sobre la crianza de niños XXXII: Mi primer acto como padre en una Escuela Pública

Recién me tocó presenciar el primer acto oficial en el jardín de Jx (aparte del de inicio de clases) y fue el del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia. Por supuesto los pequeñajos no entendían mucho lo que ocurría, solo que los padres estaban presentes cuando habitualmente no lo están y que se escuchó una canción no tan alegre como las que se cantan habitualmente (Como La Cigarra, interpretada por Mercedes Sosa).

La voz sentida, casi quebrada de la maestrita a la que le tocó anunciar el recordatorio, me hizo pensar que estoy en el lugar y en el momento correcto. Y me hizo acordar con algo de bronca de algún que otro tontito que se hace el gil diciendo no saber qué se conmemora este día.

Nunca Más... y ahora más que nunca por nuestros hijos.

martes, marzo 08, 2011

La importancia de la ley de matrimonio igualitario

Ayer hubo un nuevo revuelo con este tema por la expulsión de Nicolás Alessio de la Iglesia Católica. Seguramente aprovecharon la volada para sacarse de encima a un personaje molesto: en su momento participó del Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo y fue siempre una voz disonante en la conservadora curia cordobesa. Es entonces sintomático que el motivo de la expulsión haya sido haber dado su opinión favorable a una ley que, si bien es cierto da en el plexo del imaginario católico ortodoxo, no representa un perjuicio para nadie y solo un beneficio para una minoría social.

No obstante el hecho que en realidad la ley no generó un cambio notable para las mayorías, sino asignar un derecho (para mí no esencial, no tanto por ejemplo como la AUH) a una minoría que sufría por no tenerlo, entiendo que la ley contiene una llama de vital importancia simbólica para toda la sociedad y en particular para los progres que seguimos agradablemente sorprendidos por ciertas medidas que este gobierno corrupto y montonero ha asumido como bandera de su proceso político: la ley de matrimonio igualitario pone en evidencia que las desigualdades sociales provienen fundamentalmente de categorías ideológicas, no deben naturalizarse o asumirse por designio divino y coloca al Estado en posición de corregir tales desigualdades en un marco de diversidad. Aquí radica, para mi humilde entender, el carácter más potente de la norma: no asumir como dadas naturalmente las diferencias cultural-ideológicas y evitar que se cristalicen en desigualdades sociales, esa es la tarea de un Estado que se considera progresista. Y esta es la gran batalla cultural que es importante ganar

Dia Internacional de la Mujer

La multinacional norteamericana para la cual brindo servicios distribuye una tarjetita por correo electrónico:

Desde principios del Siglo XX se celebra el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer, en conmemoración a la lucha de las mujeres en pro de la justicia, la paz y el desarrollo de la igualdad en la sociedad y en la integridad como persona.

Lo que curiosamente no dice el folletito de la multinacional norteamericana es que esa lucha se llevó en 1908, dentro de su propio país, la vida de 146 mujeres que murieron calcinadas con bombas incendiarias arrojadas por los rompehuelgas dentro de la fábrica textil que ocupaban en protesta por bajos salarios e infames condiciones de trabajo. Esa es la respuesta de El Capital ante quienes se resisten a la explotación y expoliación. No hay que olvidar que los grandes avances en materia de justicia, paz e igualdad no se consiguieron con gestiones de ONG sino con las propias vidas de los desposeídos que se resisten a renunciar a esos valores. De algún modo, ingenuo de mi parte, esa omisión me irrita. En todo caso hacela de callado, mandá un saludo pelado sin ninguna alusión a la historia, que, despojada de su contenido, es una afrenta a quienes dieron la vida por ella. No nos roben esto también.

¡Saludos a las Compañeras!